19 ago 2011

Querido pequeño ser:

Quiero contarle algo extremadamente placentero e inesperado que me pasó: hace tres días me acosté con el pequeño Bost. Naturalmente fui yo quien lo propuso, el deseo era de ambos y durante el día manteníamos serias conversaciones mientras que las noches se hacían intolerablemente pesadas. Una noche lluviosa, en una granja de Tignes, estábamos tumbados de espaldas a diez centímetros uno del otro y nos estuvimos observando más de una hora, alargando con diversos pretextos el momento de ir a dormir. Al final me puse a reír tontamente mirándolo y él me dijo: "¿De que se ríe?". Y le contesté: "Me estaba preguntando qué cara pondría si le propusiera acostarse conmigo". Y replicó: "Yo estaba pensando que usted pensaba que tenía ganas de besarla y no me atrevía". Remoloneamos aún un cuarto de hora más antes de que se atreviera a besarme. Le sorprendió muchísimo que le dijera que siempre había sentido muchísima ternura por él y anoche acabó por confesarme que hacía tiempo que me amaba. Le he tomado mucho cariño. Estamos pasando unos días idílicos y unas noches apasionadas. Me parece una cosa preciosa e intensa, pero es leve y tiene un lugar muy determinado en mi vida: la feliz consecuencia de una relación que siempre me había sido grata. Hasta la vista querido pequeño ser; el sábado estaré en el andén y si no estoy en el andén estaré en la cantina. Tengo ganas de pasar unas interminables semanas a solas contigo.




Te beso tiernamente,
Tu Castor.



8 comentarios:

  1. Cómo adoro esas cartas, cómo adoro ese libro!!! Me acabo de emocionar pensando en la primera vez que lo tuve entre mis manos temblorosas. Cuando por fin lo sentí mío, al salir de la librería (aquélla era encantadora. María Balteira, en Compostela, pero, desgraciadamente, ya no existe...), me quedé parada en medio de la acera, contemplando las tapas blancas, y la foto en blanco y negro de Sartre, sobre uno de los puentes de París, con su pipa. Creo que aquella fue la primera vez que tuve conciencia física de un libro, como si un hombre venido de un sueño de pronto se hubiera materializado ante mí. Gracias, Nina!!Bico

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  2. Hoy pensaba en el Castor, en su fuerza, pero acá anda también su delicadeza. Un abrazo.

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  3. Amo esa carta, la adoro a Simone ♥.
    Me mata esa parte donde dice "Naturalmente fui yo quien lo propuso" pero no me cabe la menor duda!

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  4. Ay! No me daba cuenta...la foto es la misma que tengo yo en mi blog!!! A mí me ocurrió una linda casualidad con una foto de Simone, cuando estuve en París...

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  5. Preciso lo que seleccionaste para hoy.

    Una carta bellisima, pura, intima.

    Besos.

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  6. uf...
    terrible...
    (y me dio tanta pero tanta tristeza...)

    creo que ese amor que se tenian, tan profundo,se resume en el modo en que se nombran, no? MI pequeño ser; TU castor...

    precioso.

    besos

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  7. Crearon la relacion moderna.

    Creo que la unica forma en que ahora me emparejaría yo (en dos casas).

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