7 may 2012


"Si no tienes la libertad interior, ¿qué otra libertad esperas poder tener?" 
Arturo Graf






6 may 2012



Has visto
verdaderamente has visto
la nieve los astros los pasos afelpados de la brisa
Has tocado
de verdad has tocado
el plato el pan la cara de esa mujer que tanto amás
Has vivido
como un golpe en la frente
el instante el jadeo la caída la fuga
Has sabido
con cada poro de la piel sabido
que tus ojos tus manos tu sexo tu blando corazón
había que tirarlos
había que llorarlos
había que inventarlos otra vez.

Julio Cortázar


























5 may 2012




‎"Una parte de cada vida, y aun de cada vida insignificante, transcurre en buscar las razones de ser, los puntos de partida, las fuentes. Mi impotencia para descubrirlos me llevó a veces a las explicaciones mágicas, a buscar en los delirios de lo oculto lo que el sentido común no alcanzaba a darme. Cuando los cálculos complicados resultan falsos, cuando los mismos filósofos no tienen ya nada que decirnos, es excusable volverse hacia el parloteo fortuito de las aves, o hacia el lejano contrapeso de los astros".








Marguerite Yourcenar




























4 may 2012


"Hay dos modos de llegar a mí, 

mediante los besos o la imaginación.


Pero existe una jerarquía; 

los besos por sí solos 

no bastan."








Anaïs Nin









3 may 2012


"Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación."



Proverbio árabe






2 may 2012


Pensar era inútil como desesperarse por recordar un sueño del que sólo se alcanzan las últimas hilachas al abrir los ojos.

Lo que nos salva a todos es una vida tácita, que poco tiene que ver con lo cotidiano o lo astronómico, una influencia espesa que lucha contra la fácil dispersión en cualquier rebeldía más o menos gregarios, una catarata de tortugas que no termina nunca de hacer pie, porque desciende con un movimiento retardado que apenas guarda relación con nuestras identidades de fondo blanco e impresión dígito-pulgar derecho, la vida como algo ajeno pero que lo mismo hay que cuidar, el niño que le dejan a uno mientras la madre va a hacer una diligencia, la maceta con la begonia que regaremos dos veces por semana.

Ningún juego te hará olvidar: tu alma es una máquina fría, un lúcido registro.

Nunca olvidarás nada en un torbellino que arrase lo grande y lo pequeño para tirarte a otro presente.

Dormir, el olvido pequeño.

Una lenta ceremonia incomprensible nos había acercado en la noche desde nuestras infinitas distancias.

No me dormiré, no me dormiré en toda la noche, veré la primera raya del alba en esa ventana de tantos insomnios,sabré que nada ha cambiado.

No se lo diría nunca, que su nombre me llegaba como los perfumes que atraen y repelen a la vez, como la tentación de acariciar el lomo de una ranita dorada sabiendo que el dedo va a tocar la esencia misma de la viscosidad. Cómo decirlo a nadie si tú mismo no podrías saber que la mención de tu nombre, el paso de tu imagen en cualquier recuerdo ajeno me desnuda y me vulnera, me tira en mí misma con ese impudor total que ningún espejo, ningún acto amoroso, ninguna reflexión despiadada pueden pueden dar con tanto encono; que a mi manera te quiero y que ese cariño te condena porque te vuelve mi denunciador, el que por quererme y ser querido me despoja y me desnuda y me hace verme como soy.


Abrazarse interminablemente o con una violencia que los apartaba 

en el mismo instante, como si del deseo creciera amarga la 

distancia. Y siempre por debajo, un silencio agazapado donde latía 

el tiempo enemigo.

EmilyPeacock-- Cross stitch:  Kiss & Hug


Modelo para armar
Julio Cortázar




GRACIAS: 





1 may 2012



La luna se puede tomar a cucharadas 
o como una cápsula cada dos horas. 
Es buena como hipnótico y sedante 
y también alivia 
a los que se han intoxicado de filosofía. 
Un pedazo de luna en el bolsillo 
es mejor amuleto que la pata de conejo: 
sirve para encontrar a quien se ama, 
para ser rico sin que lo sepa nadie 
y para alejar a los médicos y las clínicas. 
Se puede dar de postre a los niños 
cuando no se han dormido, 
y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos 
ayudan a bien morir. 

Pon una hoja tierna de la luna 
debajo de tu almohada 
y mirarás lo que quieras ver. 
Lleva siempre un frasquito del aire de la luna 
para cuando te ahogues, 
y dale la llave de la luna 
a los presos y a los desencantados. 
Para los condenados a muerte 
y para los condenados a vida 
no hay mejor estimulante que la luna 
en dosis precisas y controladas.



La luna
Jaime Sabines